Capitulo 18

- ¿Isabella estas allí?- Rayos era la voz de Annie.

- Claro que pasa- Dije sobresaltada

- Como que pasa, estamos en clase, ¿el Sr. Elliot te hizo una pregunta no lo oíste?

- ¿Qué? No, ¿que preguntó?

- Olvídalo ya respondieron. ¿Te pasa algo? Te noto preocupada.

- No es solo que estoy algo distraída

- Presta mas atención, si así empiezas el año no se como vas a terminar.

Annie tenía razón, habían pasado tres días desde que me llegó la nota de Rosalie y a pesar de que me había hecho el firme propósito de no pensar el ello me sorprendía pensando a cerca de donde estuvieron este tiempo, si estarían todos aquí y sobre todo donde estabas.

No, esto era demasiado, no debía esperar nada. Cerraría mi mente y me obligaría a no pensar.

- Bella, ¿que te parece ir a cenar para celebrar tu cumpleaños?- La voz de Jacob me saco de mi trance.

- No Jacob tengo planes gracias.

- Vaya Jacke la chica vampiro te está tirando arroz- era la voz de Leah, no me había dado cuenta de que estaba con Jacob.

- No le estoy tirando nada, es sólo que tengo planes con mi novio- dije acentuando el titulo de novio. Aunque todavía no lo habíamos hablado estaba segura de que acordaríamos algo ese día para pasarlo en su casa.

- Pues deberías preguntarle, porque no fue eso lo que oí- dijo un tanto molesta.

- Leah cierra la boca- dijo Jacob mirándola con severidad.

- Si ya empezaste a cantar ¿por qué no terminas Leah?- había algo que ella sabía y me estaba ocultando.

- Es una sorpresa, eso es todo, pero mi amigo arrastrado aquí presente quería adelantarse a John pidiéndote una cena privada cuando se está planeando una celebración algo mas abierta.- Dijo mirando con desprecio a su amigo

- No quiero nada de celebraciones, ni sorpresas ni regalos- dije elevando la voz

- Mira Bella no me entusiasma organizarte nada, a mi solo me invitaron de relleno así que si quieres desquitarte anda con tus amigos, además hagan lo que hagan siempre será mejor que la ultima que te hicieron los chupasangres, al menos esta vez nadie te saltará encima- Y se alejó muy enfadada.

- ¿Jacke que le pasa a Leah?- dije mirándolo.

- Nada, ella es así. Ya sabes desde lo de Sam es una amargada, además creo que le molesta haya tanta gente pendiente de ti- Dijo sonriendo

- ¿Gente pendiente de mi?-Eso era ridículo

- Tus amigos están planeando algo para ti y son varios, además yo estoy aquí para protegerte y Sam también la llamó ayer para pedirle que te vigilara- dijo como si hubiera querido mantenerlo en secreto.

- ¿Sam le pidió a Leah que me vigilara?

- Bueno que esté alerta mejor dicho, parece ser que ha habido desapariciones en Chicago y eso ha puesto nervioso a Sam, su territorio está allá en la reserva pero él se mantiene informado siempre de lo que pasa alrededor sobre todo por aquí- su voz era seria.

- ¿Desapariciones aquí en Chicago?- pregunté horrorizada

- Bella podría ser cualquier cosa, pero Sam es un tanto desquiciado con lo de la protección, además yo estoy por aquí no te pasará nada, pero al menor indicio tendré que comunicarme con él.

- Quieres decir que tu manada vendría si hay indicios de Victoria?

- Si es por ella o alguno mas de su tipo, si. Pero si es de las sanguijuelas Cullen yo me encargo.

- ¿Bella puedes decirme que te pasa?- La voz de John sonaba algo preocupada

- Nada John solo tengo un poco de dolor de cabeza.

- Sé que algo te preocupa lo puedo ver en tu ojos, en tu semblante, has estado mas de una hora conmigo y tu mirada es diferente. ¿No confías en mí?

- Claro que confío es solo que…

- Que no me quieres contar. Sé que no tiene que ver con los estudios, ni tu familia, ni siquiera con Jacob.

- En serio no debes preocuparte. Es solo que me siento un poco extraña, nunca me ha gustado cumplir años y pienso en eso.

- Hablando de eso, qué te parece ir a cenar ese día- dijo sonriendo

- ¿En tu casa? ¿O vamos a necesitar un lugar mas grande?- Pregunté conteniendo mi molestia

- ¿Porque lo dices Bella?

- Porque a lo mejor no cambemos y no me digas de que hablo, ya se que planeas algo y sabes bien que no me gustan las sorpresas

- María te dijo verdad. Sabía que no podría…

- ¿Ella también esta implicada? ¿Al parecer vas a organizar algo grande verdad? Y ni siquiera me consultaste si estaba de acuerdo.

- No te molestes, es sólo que quiero hacerte algo especial, ya que el año pasado…

- no tienen porque hacerlo.

Bella yo quiero hacerlo. Perdona por no decírtelo. Te prometo que solo seremos nosotros y los nuestros amigos.

- ¿Entonces no invitaste también a Leah y Jacob?

- Sabía que no se iba a callar.

- En realidad no fue él.

- No creo que haya sido Leah, ella es muy reservada.

- ¿Leah reservada? Obviamente nunca has estado presente en nuestras conversaciones. Te sorprenderías de las cosas que puede llegar a decir.

- Bella no seremos mas de 10 personas, no es mucho. Y he separado mesas en el Fairmont, es un lugar precioso con una vista espectacular.

- ¿Donde queda?

- En el gran parque (o parque Grant), he reservado la mejor mesa…

Me tensé, eso era demasiado cerca, aunque el parque era grande no tenia la mas minima duda de que Rosalie me encontrara.

- ¿Bella me oyes?

- Si, ¿a qué hora será?

- A las siete, que dices.

- Que sea a las ocho.

- Buenos, no hay problema, puedo preguntar porqué

- Tengo cosas que hacer. Bueno nos vemos, tengo deberes- le dije y me fui a mi habitación. Tal vez podría hablar con Rosalie y luego ir a lo de la cena. Pero entonces Jacob se daría cuenta o podría tal vez sentirla estando cerca. Esto se complicaba mucho.

"En un día feliz, una niña nació y se llama Isabella…

Qué era todo ese ruido. Abrí los ojos y alrededor de mi cama había varias personas. Me ruboricé. Porque hacían eso, que parte de "no me gustan las sorpresas" no entendían. Acaso no se daban cuenta que cumpliría 20 años, que el tiempo pasaba y me alejaba mas de aquello que tanto quería. Que si pudiera deshacer todo no lo dudaría un instante aunque eso signifique que no los hubiese conocido. Y el tiempo seguiría pasando era como querer apretar la arena en mis manos, se me estaba escapando y así apretara mas, no la podría retener. Así sería, tenía que envejecer, esto era una condena, tal vez si no te hubiese conocido habría sido diferente, me habría conformado. Pero como puedes acostumbrarte a la penumbra después de haber contemplado la luz. Como vivir entre sombras si has visto el resplandor. No jamás podría ser como si nunca te hubiera conocido. Era vivir una vida de otra persona, eso era hasta ahora lo que sentía. No era mi vida, no eran mis sueños y no sería feliz axial jamás…

- Bella no llores, por favor pequeña no queríamos que estés triste- dijo John enjugando una lágrima en mis mejillas.

- Lo siento chicos es solo que me emocioné- mentí.

- Queremos verte sonreír, hoy es un día especial para todos porque tu lo eres para nosotros- sentí los calidos brazos de Annie

- Claro Isa, no sabíamos que podías ser tan emotiva- Dijo María sonriendo –Oye tu deja esas bolsa en paz, ni siquiera cooperaste y ahora quieres comer gratis….- y diciendo esto salió de mi habitación a la salita común.

- Otra vez peleándose, porque no se pueden llevar bien ni siquiera hoy- oí decir a Juliet

- Con quien pelea María – pregunté a John que estaba más cerca de mí.

- Con el perr…perdón con tu amigo Jacob- dijo divertido.

- Bueno salgamos de aquí para que Isabella pueda cambiarse, ven John hay que preparar este desayuno a ver si cabemos todos en la salita- Rachel me sonreía.

Me puse lo primero que encontré y salí a desayunar, no habían suficientes sillones por eso los varones estaban sentados en el suelo, todos alrededor de la mesita de centro donde habían puesto todo lo que habían traído.

Oí el sonido de un golpe.

- Ya te dije que dejaras eso, te comiste uno hace rato, ¿que no tienes modales?- Era María gritándole a Jacob después de haberle pegado en la mano.

- Tengo mas hambre que modales, ya va a ser las 8 de la mañana y anoche no cené- dijo Jacob apenado. -Hey Bella que bueno verte despierta- me dijo con una gran sonrisa.

Comimos todos, era agradable ver allí a mis amigos, al parecer iniciaríamos el día juntos pero no podía asegurar que lo termináramos de la misma manera. No sabía que esperar del encuentro de esta noche. Probablemente nada.

El día transcurrió lentamente, yo miraba la hora muy a menudo, Annie se dio cuenta pero no me decía nada. Era sábado así que no tenía clases y me la pase arreglando mi habitación y limpiando. Como a las 5 pm John llegó por mí, hablo rápido con Annie y tocó mi puerta.

- ¿Bella nos vamos ya? Me dijo

- Tan temprano, yo esperaba alcanzarlos a las ocho en punto- dije nerviosa

- Claro que si, pero quería dar una vuelta antes contigo- y me tendió una caja

- no quiero sorpresas- le dije

- No le puedo decir eso a mi madre. Te envía esto y espera que pasemos a verla después de cenar.- dijo tristemente

- Bueno, lo guardaré

- No, debes ponértelo, ella quiere vértelo puesto mas tarde.

- Está bien. Salgo enseguida y ya hablaremos- dije

Era un precioso vestido azul, algo corto y coqueto pero muy hermoso.

- Esta preciosa- me dijo él cuando salí a la salita y sus ojos se abrieron mucho.

- John quería pedirte algo. Verás necesito un tiempo a solas, pensar mucho. Es una costumbre mía dar un paseo todos los años en esta fecha para hacer un balance de las cosas. Es un nuevo ciclo, un año se cierra y otro comienza, ¿me entiendes?

- Perfectamente yo lo hago en mi ático. Pero creo que tú preferirías el aire libre ¿verdad?

- Claro solo unas vueltas y estaré a las ocho en el restaurante.

- Bien, no hay problema ¿te puedo llevar?

- No, prefiero hacerlo sola, si no te molesta.

- Claro que no, entonces ve, pero te espero a las 7:30 en la fuente y así llegamos juntos al restaurante.

- Bien allí te espero.

Y salí lo más rápido que pude. No sabía si tendría tiempo para llegar con John, pero confiaba que si estaba en el parque Rosalie me encontraría antes y podríamos conversar libremente, si es que lo que tenia que decirme era muy corto entonces habría tiempo hasta de meditar y serenarme. Lo necesitaría para actuar como si nada en la cena.

Me tomó 15 minutos llegar al parque, comencé a seguir el camino habitual y no me desvié. Ella estaría por allí, seguro ya me habría olido. El viento estaba en mi contra y eso lo haría más fácil. Pero había mas personas de las que esperaba, así tome el camino que bordeaba el lago.

Era hermoso, cuantas veces lo habrías visto así, era un sueño, el sol comenzaba a declinar, el cielo se volvía amarillo, naranja y rojo, el crepúsculo se acercaba.

"Es la hora del crepúsculo. Es la hora más segura para nosotros. El momento más fácil, pero también el más triste, en cierto modo... el fin de otro día, el regreso de la noche"
Tus palabras me vinieron a la memoria como si hubieran pasado años.

Y recordé un día como hoy hace dos años mientras Carlisle curaba mis heridas
: "
Ocurrió justo después del crepúsculo, cuando yo llegaba para relevar a los doctores que habían estado trabajando todo el día"

El día que Carlisle se vio obligado a salvarte. Porque yo jamás pensaré que estás muerto aun cuando tu corazón no lata, ni haya sangre en tus venas. Un día hace más de 100 años, no lejos de aquí, bajo el mismo sol, más o menos por esta misma fecha, cerca de este mismo lago. Por eso vine a este lugar, no para alejarme, estaba claro al fin. Vine para estar mas cerca de ti, ya que no sabía donde estabas, yo me acercaría a tu recuerdo, a tu vida mortal. Era un hermoso día, aun para morir, sería feliz si esto fuese lo ultimo que viera el crepúsculo…al igual que tu…

Unos ruidos detrás de mí me sacaron de mis pensamientos y mi corazón dio un vuelco. No me atrevía a mirar, las piernas no me obedecían, todo en mi se detuvo, mi respiración, mi corazón y aun mis pensamientos.

Esperaba una voz, esperaba oír mi nombre, sea de quien sea esperaba que alguien llamara por mi. Escuche los pasos acercándose cada vez más…

Capitulo 17



Estaba conforme con la decisión que había tomado. Me mantendría al lado de John mientras pudiera. Seríamos amigos inseparables y ya no me sentía tan sola, le había hecho espacio en mi corazón a alguien más. Un pequeño espacio lo reconozco.

Y podría alejar a Jacob en ese terreno. Hubiese querido permanecer neutral, como un país que no entra en conflicto en una guerra. Pero al decidirme por uno necesariamente le daba la espalda al otro. No podía ni quería ser parte de la vida de Jacob, un licántropo, enemigo mortal de los vampiros. Si me decidiera por Jacke no habría marcha atrás jamás, no podría volver a ver a los seres que tanto amaba. Me había obligado a no pensar en ellos. Los Cullen. Alice la duendecilla y mi mejor amiga. Jasper, no le guardaba rencor, se que fue un momento de debilidad y lo había perdonado además nunca olvidaré como me protegió en Phoenix. Emet el gigantesco niño, extrañaba su sonrisa, así como a la fría y hermosa Rosalie, aún no podía creer que hubiera algo en mí que ella pudiera envidiar. La dulce Esme y el sabio Carlisle. La familia que quise tener con todo mi corazón. Y Edward. Como se define en una palabra a alguien que lo es todo. Sol. Si eres mi sol. Ahora vivo en una larga noche con algunas estrellas pero siempre es oscuridad. Y no sabía si mi sol volvería a brillar. Yo quería contemplarlo una vez más. Al menos una vez mas.

- Gracias por quedarte a almorzar con nosotros Isabella- Afirmó Clara.

- Si Bella gracias. Luego iremos a la universidad, creo que habrá algo hoy para recibir formalmente a los nuevos estudiantes- comentó John

- ¿Algo así como una fiesta?- Pregunté

- Es una ceremonia de bienvenida pero después imagino que se convertirá en un baile. ¿Quisieras ir conmigo?

- Si, creo me gustaría.

- Entonces apenas termines de comer vienes conmigo Isabella. No puedes ir así y perderías tiempo en ir a tu habitación en cambiarte- Clara me miraba sonriendo.

- Clara no creo que sería pasarme de…

- Nada de eso, tengo una línea de ropa, es uno de mis negocios. Y siempre me traen muchas cosas para que las revise, tengo una habitación llena de vestidos y accesorios que nunca usaré. Y jamás me oíste, jamás te sientas mal por ello. Eres como una hija para mí. Permíteme consentirte.

- Gracias Clara.

Salimos por la tarde de casa de los Massen a la universidad. Había quedado sorprendida por la cantidad de cosas que tenía Clara, solo se comparaba a la colección de Alice. Iba vestida con un traje casual, no era elegante pero se veía bien.

- Estas muy guapa Is… Bella, es difícil reacostumbrarse.- dijo John divertido

- Gracias, tu ropa tampoco está mal.

- Bueno entonces…

- Oh Jacob si, bueno para él tu y yo seguiremos siendo novios.

- Y para los demás. Nuestros amigos, les mentiremos también

- No, pero tampoco diremos nada, ellos no saben lo que pasó.

- Bueno, aunque sabes, si quieres que sea sincero, sé que hay algo que me ocultas… algo que no dijiste. No quiero ser entrometido. Es con respecto a las cualidades de Jacob.

- ¿Que hay con ello?

- Llegaremos y le diremos a Jacob que somos novios. Después de lo que él dijo en mi casa es lógico que crea que me has contado todo. Que lo sé todo. Yo procuraré no hablar mucho. Solo dime porque si hay algo que no sepa no quiero que él insinúe cosas que no pueda entender.

- Eres muy observador John. Si, hay cosas que por tu bien no deberías saber. Solo te diré que Jacob además de la fuerza tiene una temperatura superior a la normal y que en muchos aspectos es más rápido y veloz. Pero sigue siendo un joven inmaduro.

- ¿Y Edward Bella? ¿El también es veloz y tiene esa temperatura?

- No, quizás oigas a Jacob referirse a Edward y su familia como fríos. Ellos eran diferentes. Edward era mucho mas veloz y fuerte que Jacob y muy intuitivo. Y Jacke usará muchos insultos cuando se refiera a él.

- Claro, son de un clan enemigo. Frío y calor. Además ya lo oí decirle sanguijuela. Lo que no entiendo y no logro encajar es cuando te dijo que yo era un tatara sobrino de Edward.

- No quiero hablar de eso John.

- No hay problema, mi madre me contó algo y aunque las piezas no encajen puedo llevarlo bien. Gracias por compartir esos detalles conmigo me darán más seguridad.

- ¡Bella! ¿Dónde te habías metido?- Era la voz de Jacke.

- Buenas noches Jacob. Gusto de verte. Mi novia pasó la noche en mi casa ya que tu descortesía la desestabilizó un poco- John habló lentamente y con una sonrisa.

- ¿Qué dijiste niño rico? ¿Traduce si?- Se burló Jacke

- Dije que Bella se quedó conmigo porque eres un maldito grosero- Dijo mas rápido – ¿Te quedó claro ahora?

Jacke abrió los ojos y lo miró por un momento y luego se volvió a mí.

- Vaya tu amiguito es un gruñón- Se rió Jacob –Este gatito se cree león- y soltó una carcajada.

- ¿Qué quieres Jacke?- Dije con cara de pocos amigos

- Bella tienes que verla. Ha sido una sorpresa- mi amigo se veía emocionado

- ¿Verla? ¿De quién me hablas?- Pregunté

- Leah, por fin se decidió.

- ¿Leah Clearwater, la hija de Sue?- Pregunté asombrada

- Sí. Está aquí. Llegó esta mañana y hoy nos darán la bienvenida.- se veía contento

- ¿Nos darán? Quiere decir ¿que Leah estudiará aquí?- esto no tenía pies ni cabeza.

- Si. Ganó la beca el año pasado, pero como Harry murió no quería separarse de su madre. Pensé que iría a Seattle pero se decidió finalmente por venir aquí.

- Vaya, que bueno, me alegro por ella- le dije

- Tienes que venir a la ceremonia es en una hora.- me rogó

- Claro, para eso hemos venido- dije mirando a John.

- ah bueno, claro el también puede venir

- No necesito invitación, amigo, esta también es mi universidad- dijo John algo molesto.

- Ya arreglaremos cuentas después, vas a necesitar saber un par de cosas que no imaginas ojitos verdes- se burló Jacke

- Ya estoy enterado Jacob y fueron mas de un par de cosas lo que me dijo Bella, así que tus explicaciones sobran- Jacob abrió los ojos y me miró con una gran duda.

- Todo a su tiempo Jacke, ahora ve a vestirte, no pensarás ir a tu bienvenida con la misma ropa que traías ayer- le solté, ya que parecía que aún no se había cambiado.

- Si bueno. Ya hablaremos Bella- Y diciendo esto corrió hacia su pabellón

- ¿Alguien mas de Forks viene va a estudiar aquí? Dijo John con curiosidad

- Sí. Es también de la reserva de Jacob en La Push. Su padre murió el año pasado, era muy buen amigo de Charlie. Ella tiene mal carácter siempre fue un poco esquiva conmigo y considerando mi relación con los Cullen no creo que me tenga mucho afecto. Pero vamos.

Después de la bienvenida todos los estudiantes nuevos nos miraban con recelo. Cuando el salón quedó libre el delegado estudiantil se dirigió a ellos en un tono menos formal del que lo hicieron las autoridades de la universidad. Y terminó con un "a divertirse" y todos sonrieron y comenzó la fiesta.

John me tomó por la cintura y me llevó a bailar. Vimos a Annie con un estudiante de Leyes de último año. Karin bailaba con Anton. Juliet estaba al lado del delegado estudiantil, Rachel bailaba atrevidamente con un estudiante nuevo que tenía los ojos desorbitados y agradecía por su suerte y Jacob bailaba con Leah, ella había crecido bastante siempre había sido más alta que yo pero se veía enorme y algo mayor. Su cabello muy negro le cubría toda la espalda ya que traía una blusa muy ceñida y descubierta.

Cuando la pieza termino Jacke se acercó a nosotros.

- Vamos Leah, saluda a Bella- Le oí decir

- ¿Bella eres tu?- dijo mirándome con cara se duda. –Te ves extraña- dijo

- Hola Leah, me he hecho algunos cambios. Te presento a mi novio John. John ella es Leah una amiga de la infancia.

- Vaya Bella que gusto saber que ahora te relacionas con personas normales- dijo sarcásticamente mientras saludaba a John y Jacob le dirigió una dura mirada.

- Bella baila conmigo- Dijo Jacob y antes de que pudiera reaccionar ya estaba en la pista de baile otra vez.

- Ya escupe. ¿Qué le has dicho al ricachón?- Preguntó rápidamente

- Sólo lo que debía saber y te agradecería que por tratarse de mi novio le llamaras por su nombre.

- Es un niño Bella.

- El niño eres tu Jacke porque te comportas como tal. John es una persona maravillosa y lo quiero mucho. ¿No era eso lo que querías?, que me alejara de los vampiros y que hiciera mi vida normal, ¿no era eso también lo que querían los Cullen cuando se fueron? Pues tengo noticias, he encontrado a alguien especial con quien empezar algo. Si tu quieres estar cerca para protegerme es cosa tuya pero quiero que quede en claro que tengo una vida y un novio y que quiero olvidar el pasado.

- Bueno Bella si eso es lo que deseas. Aunque pensé que tal vez tendríamos una oportunidad. Pero no creas que te voy a dejar desprotegida ni que me creo que le has contado todo, tú no eres así. Sé que te llevarías el secreto de los chupasangres a la tumba y yo no lo puedo develar por el tratado. Si eso es lo que quieres adelante ya se que prefieres a los ricos y bien parecidos.

- Eso no es cierto Jacke.

La música terminó y vi a Leah y John empezar un nuevo baile. Parecía que habían congeniado. Sentí una mano sobre mi hombro.

- Isa, necesito hablar contigo. ¿Podemos? Baila conmigo- dijo Anton preocupado.

- Claro Anton, ¿dime que pasa?- él se veía nervioso.

- Este verano fui de vacaciones a pescar con mi padre, mis hermanas y mi madre viajaron a México y nos dejaron solos. Pasé un mes allí y conocí a una mujer, era algo extraña y terriblemente hermosa.- Y se quedó pensando como si le costara salir de sus recuerdos.

- Me alegro Anton, pero porqué me cuentas estas cosas, ¿no sería mejor que lo hables con John primero? Me refiero a que son hombres y de seguro se entenderán bien- dije tratando de no parecer cortante. Ya tenía suficientes cosas en la cabeza como para ser confidente de Anton.

- Disculpa Bella es que solo quería decirte que te envía saludos

- ¿Me envía saludos? ¿Acaso me conoce?

- Ah si, soy a veces tan directo. Le conté que estudiaba en Chicago y ella me dijo que había vivido un tiempo en Seattle. En Forks. Así que le conté que tenía una amiga que también había vivido allí y pues me dijo que te conocía- Me congelé en ese instante. Hermosa y extraña.

- ¿Te dijo cual era su nombre?- Pregunté nerviosa

- Rosalie. ¿No es un nombre antiguo y hermoso? Creo que la abuela de mi padre se llamaba así.

Mi corazón latía muy rápido y mis piernas temblaban.

- ¿Donde la conociste? ¿En qué lugar exactamente?- dije casi temblando

- En el Lago Buena Vista en
Milwaukee.

- ¿Qué más te dijo? ¿Estaba sola?- Pregunté con un hilo de voz

- Si, estaba sola, la vi salir del bosque ya anocheciendo y conversamos por un par de horas. Le dije que estudiabas acá y que eras mi amiga. Al día siguiente también conversamos y me dio algo para ti. Pero después ya no la volvía a ver. No se donde vive ni su número. Confío en que tu sepas donde puedo encontrarla.- dijo algo desesperado.

- ¿Te dio algo para mi?

- Si aquí lo tengo, confío en que sea su dirección y quería pedirte si la podrías compartir conmigo, para llamarle o escribirle.- Parecía esperanzado, conocía esa mirada, había sido deslumbrado por ella. Pero me costaba pensar, ¿qué haría Rosalie sola en Milwaukee?

Era un sobre rojo muy Rosalie, lo abrí con cuidado.

"Necesito hablarte. El día de tu cumpleaños al ponerse el sol en el Gran Parque"

Mi corazón se detuvo. Era la primera noticia que recibía. No quería hacerme ilusiones, ni pensar en nada más. Tampoco quería guardarlo en secreto pero estaba segura de que Jacob no estaría de acuerdo. Pero era Rosalie.

- ¿Isa, te encuentras bien?- dijo Anton

- Si, es solo que me sorprendió. No me dice su dirección, sólo que vendrá a verme si puede. Por favor quiero pedirte que no se lo digas a John.

- Como quieras Is, sólo si prometes que si sabes algo mas de ella me lo dirás- parecía sincero, realmente quería volverla a ver.

- Está bien, si la veo le hablaré de ti.- Le dije y sonrió

- Excelente, cuento contigo- Me dijo alejándose.

Quedaba una semana para mi cumpleaños y me parecía una eternidad. Esto no se lo diría a nadie más. Era sólo para mí. Tiré el sobre a la basura, Jacke tal vez podría sentir ese olor. No se cómo pero buscaría la forma de llegar a ella.

Capitulo 16

CAPITULO 16
EDWARD POV
A pesar de todo lo que había leído no podía borrar una sonrisa de mi rostro. ¿Sonriendo yo? Si después de tantos años una leve sonrisa me sorprendió. Y es que pasara lo que pasara Bella siempre me sorprendería con algo completamente inesperado. Pensé mientras leía que revelaría nuestro secreto y no la culpaba, había sufrido mucho por ello. Pero decirles que nuestra familia pertenecía a la mafia era lo más ridículo que había leído. Nosotros unos mafiosos y Jasper un adicto, eso tendría sentido para aquellos humanos. Lo que demostraba su gran corazón, al mentirles también los protegía a ellos. Bella era sin duda la mujer más especial que había conocido.
Y por otro lado sentía un odio terrible por ese estúpido de Jacob Black, como había podido hablarle así a Bella, hacerla sentir de esa forma delante de otras personas.
Él no sabía lo que yo sentía, como se atrevía a decir que no la amaba y que la había abandonado en el bosque. Bella me siguió y por eso casi muere, eso si era mi culpa entonces.
Y Clara, me recordaba tanto a mi madre. Siempre analizando las acciones de los demás mas que sus palabras. Esa era una de las pocas cosas que recordaba de Elizabeth Massen que era una mujer sabia.
"Se necesita amar mucho a alguien para dejarlo libre cuando sabes que no lo harás feliz"
siempre recordaría estas palabras para darme fuerza en este exilio.
Sabía que John no podría proteger a Bella si Victoria volvía, eso tal vez solo lo podría lograr Jacob, pero este lobo era tan torpe y no creo que realmente amara a mi Bella. Tal vez de esta decisión dependiera su futuro. Podía llevar una vida tranquila y con el tiempo se olvidaría de mí y sería feliz. Solo Victoria era la sombra de un pasado que no la dejaba.
Tomé una carta más y traté de alejar las hipótesis en mi mente sobre cada una de sus decisiones. Esto era un regalo invaluable que ella me hacía. Compartir conmigo su vida al menos de esta forma era como tenerla otra vez como espectador y no como protagonista. Era suficiente.
ELECCIONES DIFÍCILES

Una vez leí en una de las aulas de la Universidad un pensamiento que vino a mi memoria "La vida es elegir. Y elegir es siempre tener que sacrificar algo"

¿Sacrificaría ahora a una persona? No. Sería un camino el que elegiría y sacrificaría el otro. Y eso me asustaba. Con Edward siempre había sido fácil. Sabía que él era el elegido, algo muy dentro me lo gritaba. Jamás habría elegido a otra persona que compitiera con él. Pero ante mi se abrían dos rutas.

John era una buena persona, agradable, amable y comprensivo. Aún me faltaba conocerle y ver algunos aspectos suyos que sólo llevando al límite a alguien se mostrarían. Como ocurría ahora. Había visto los celos y la ira en sus ojos. Pero sabía que podría controlarlos. Lo que no estaba segura es si en verdad me amaba. Ahora que conocía la verdad, solo la que podía procesar, debería preguntarle si estaba dispuesto a vivir una vida a medias porque yo nunca podría entregarme por completo. Ya había dado todo y no había guardado nada para mí. Tomaría tiempo reconstruirme y aunque lo consiguiera jamás tendría el mismo brillo. ¿Acaso él no merecía a alguien completa?

Y Jacob. ¿Como podría amarle? Tal vez él lo único que podría provocar en mi sería pasión. Algo físico y tórrido. Pero no era una vida que yo quisiera. El amor y la pasión van juntos y son dos caras de la misma moneda. Al menos para mi así era. Pero también era mi amigo y no quería perder su amistad.

Decisiones difíciles. Debía pensarlo bien. Qué es lo que yo haría si no me estuviera viendo forzada a elegir. Si no fuera obligatorio elegirlos ahora.

Creo que simplemente los tendría por amigos a los dos. Sé que el amor no volvería pero porque obligarme a elegir entre dos personas cuando no amo a ninguna de ellas.

- Isa, tenemos que hablar, pero me gustaría que no fuera aquí.

- ¿Quieres ir a algún lugar en especial?- le pregunté

- Si es en esta casa. Acompáñame.

Subimos las escaleras y llegamos al tercer piso, él tiró de una perilla en el techo y otra escalera cayó. Se hizo a un lado para que yo subiera primero.

- Este es mi lugar especial. Aquí he tomado las decisiones más importantes de mi vida.

El ático era confortable, unos mullidos sillones y una pequeña ventana por donde entraba el sol.

- John lo primero que tengo que decirte es que no soy Isa. Siempre me han llamado Bella y es como me gusta que lo hagan.

- Lo siento será difícil acostumbrarme y quizás no lo logre. Aunque como te llame no es lo importante sino lo que eres en verdad.- Y me invitó a sentarme.

- ¿Y crees que me conoces?- Pregunté

- Hoy te conocí un poco mas y creo que tu también.

- Si eso es muy cierto- le respondí.

- Pero tú casi no me conoces Isa...Bella. Todo este tiempo nunca me has preguntado nada sobre mi. Siempre callabas y yo sabía que llevabas algo muy triste y no quería remover esos recuerdos, solo tu presencia me bastaba. Te tuve un tiempo con más exclusividad que nuestros demás amigos. Pero no nos conocimos casi nada. En esta última hora he podido conocerte más que en el último año transcurrido.

- Te agradezco por todo ello John y yo…

- No tienes nada que agradecer. Absolutamente nada. Estas en mi vida por algo, aún no lo veo con claridad pero se que debe ser para algo bueno. Hoy he conocido también a mi madre y ví su sufrimiento. Y el muro que levanté para separarnos se esta empezando a desmoronar. Eso es bueno y tú ayudaste a eso sólo con estar aquí.

- John solo una pregunta clara y directa. Y quiero que no tengas en cuenta mis sentimientos para responderla. Sé verás y totalmente sincero. ¿Tú me amas?

Se lo estuvo pensando unos segundos.

- Si, siento mucho amor y deseos de protegerte. Pero te seré sincero Is...Bella no estoy 100% seguro de que sea ese amor del que he oído y leído. Aquel amor que hizo que arriesgaras tu vida por estar cerca de Edward, el mismo amor por el cual el te dejó para que no te lastimaran. Para ambas cosas se necesitan de un amor muy grande. Amar a alguien mas de lo que uno se ama a si mismo y ser totalmente correspondido. Ese es el amor que me gustaría sentir alguna vez.

- Y sabes que yo no sería capaz de dártelo ¿verdad?

- Si estoy totalmente convencido de ello. Se que no es cierto si me dices que amaste a Edward. Porque estoy seguro de que aún lo amas. Porque se también que ese amor nunca se va, nunca pasa. Es un amor tan fuerte que ni el tiempo ni la distancia ni aun la misma muerte puede destruir.

Sentí mis ojos humedecerse y mis lagrimas cayeron. Nunca había logrado definir tan bien lo que yo sentía y mis dudas se borraron y mi corazón vio con claridad por primera vez en mucho tiempo. Tú jamás dejaste de amarme. Tal vez cometiste un error al pensar en darme esta oportunidad. Al no convertirme y dejar que sea humana... Si el amor es mas fuerte que todo, triunfaría también sobre la muerte porque tu no estas vivo y me amas y yo podría morir y seguiría amándote. Era algo que no podíamos evitar.

- Bella, por favor se que ya no tenemos nada que decidir porque creo que te has dado cuenta de lo que sientes, solo escúchame porque te quiero contar algo sobre mi.

Mis padres se conocieron hace mucho en la universidad, todo fue muy rápido y se casaron. Yo nací y por cuatro años ellos vivieron relativamente felices, siempre con algunos problemas porque la familia de mi madre era acomodada y no aceptaban su matrimonio porque mi padre era de una familia de comerciantes. Pero un día el conoció a su verdadero amor. Mi madre sufrió mucho y se dejó llevar por las emociones. Cuando mi padre se fue de casa, ella me trajo aquí y se dedicó a hacer la vida miserable a mi padre. Se había aferrado a su odio y durante años no me dejó verlo. Por entonces yo tenía 10 años y un día me escape de aquí para conocerlo, sabía donde encontrarlo porque lo había estado averiguando hacía meses. Llegué a su casa, era muy humilde porque mi madre se había encargado de dejarlo en la ruina. Él no estaba en casa así que no le dije quien era a la mujer que me abrió la puerta. Traía un pequeño niño en brazos. Ella estaba muy pálida y el pequeño estaba enfermo. Era mi hermano y se estaba muriendo por culpa de mi madre. Mi padre había salido a buscar empleo y no había vuelto. Entonces comprendí que el amor puede ser egoísta y hacer daño. Salí corriendo de allí para volver con ayuda, pero mi madre me encontró y me encerró por dos días sin comer ni hablar con nadie. Cuando por fin me levanto el castigo le conté lo que había visto. Ella se llenó de horror, vi en sus ojos un verdadero arrepentimiento. Corrimos hacia el lugar donde se encontraba mi hermano pero cuando llegamos, ya era tarde. Mi pequeño hermano había muerto. Llevamos a la mujer al hospital y la atendieron bien, se recuperó y luego mi padre regresó porque había estado dos semanas en una celda por robar comida para su familia pero no pudo llegar a ellos para dársela.

Mi madre pidió perdón, trató de compensar lo que había hecho. Le devolvió todo lo que le había quitado y aun más cosas. Ellos la perdonaron y se fueron de la ciudad. Su esposa nunca más pudo darle otro hijo. Ella murió unos años mas tarde y mi padre no soportó su ausencia y se suicidó.

Desde entonces me alejé de mamá. Sé ahora que estuvo mal hacerlo. Debí estar a su lado para ayudarla a superar su pena pero mi corazón no la había perdonado. Siempre recordaba a mi hermanito y lo solo que me sentía. Me aislé y pasé en este ático muchas navidades y cumpleaños. Pero hoy me pude dar cuenta realmente cuanto es que ella ha sufrido también. No es tarde y aun nos tenemos. Procuraré en adelante que sienta mi cariño.

- John esa historia es muy triste.

- Si, su historia fue muy triste, pero no tiene que serlo también para mi, ellos tomaron sus decisiones, eligieron vivir así y eso es lo que obtuvieron. Por eso no quiero equivocarme y hacerte sufrir.

- ¿Cómo me harías sufrir?

- Forzándote a decidir o forzándote a elegirme. El amor no se puede forzar Isa, tiene que ser natural y eso es algo que Jacob también debe comprender

- Entonces que crees que sería lo correcto.

- Protegerte. Eso es lo más importante ahora. Cuentas con mi amistad y mi amor para siempre. Pero no en un sentido romántico, aunque si tú quisieras también lo tendrías.

- No termino de entenderte, ¿a pesar de todo tu te quedarías conmigo? ¿Por qué si me has dicho que te gustaría conocer el amor verdadero?

- Isa o Bella escúchame, sé algunas cosas del amor como también sé que no siempre lo llegamos a encontrar o que lo podemos perder en el camino. No soy iluso y se que todas las personas en el mundo que se han casado no necesariamente es por amor verdadero. Puede que haya muchos afortunados, pero la mayoría no encuentra el amor. Si no todos serían felices y el mundo no estaría como está.

- Gracias John, me alegra haberte encontrado. Sé que no quieres forzarme a decidir pero necesito tu apoyo ahora. Sé que Edward no va a volver al menos no por un largo tiempo. Necesito que me ayudes con Jacob. Él es aun muy joven e impetuoso y no será capaz de dejarme por voluntad propia. Yo ya no tengo miedo de Victoria. Lo que tenga que pasar pasará. A veces pienso que te he usado y que lo seguiré haciendo.

- Por qué no me dejas decidir a mi si estoy siendo usado o no. Yo no siento que lo hayas hecho. Al contrario siento que he aprendido mucho contigo. Seré para ti lo que tú quieras que sea. Te apoyo en todo incondicionalmente. Y si algún día Edward regresa habrá que contarle. Si te ama tanto como tú a él comprenderá.

- ¿Entonces me ayudarás?

- Siempre. En lo que quieras.

- Sólo promete algo

- Lo que digas

- Jamás pelees con Jacob, al menos no en un combate físico.

- ¿Me puedes al menos decir porque antes de prometerlo?

- Si, no todo pero algo te puedo contar. Jacob es una de las pocas personas que me puede proteger de Victoria porque posee una fuerza sobrehumana.

- ¿Y Edward también tiene esas cualidades?

- Si, el es mas especial que todos.

- ¿Por eso lo amas verdad?

- No, lo amo sencillamente porque es Edward.

Capitulo 15

CAPITULO 15
Desperté al siguiente día y me costó recordar lo que había pasado. Me levanté y miré por la ventana, había un hermoso jardín con rosas allá abajo. Escuché golpes en la puerta.

- Adelante- dije. Estaba segura de que este sería un día largo y triste.

- Isa, cariño estas despierta- La voz de John sonaba algo triste.

- ¿Descansaste bien Isabella?- Que podía decirle a Clara. No había dormido bien, había tenido muchas pesadillas.

- Clara, John necesito hablar con ustedes. Necesito abrirles mi corazón y ser sincera.

- Eso es lo que esperaba Isabella, sé que debe ser difícil para ti pero sé que harás lo correcto. Anoche John y yo tuvimos una larga conversación y está al tanto de todo.

- Quiero hacer esto lo antes posible no me gustaría arrepentirme.

- Come algo y aséate, te esperaremos abajo- dejó la charola en una mesita, tomó a su hijo del brazo y salieron.

Por fin diría la verdad, abriría mi corazón aunque sabía que no completamente pero si lo necesario para que sepan como me siento.

Tome un jugo y unos bollos. Me duche y baje al privado de Clara. Ellos me estaban esperando.

- Siéntate junto a mi Isa- Me dijo John tomando mi mano.

- John cariño no la presiones- Clara lo miró con tristeza.

- Está bien Clara, lo necesito cerca- Los ojos de John se iluminaron y clara sonrío.

- Nací en Forks pero mis padres se separaron cuando tenía 4 años, mi madre me llevó a vivir con ella a Phoenix. Pasaba unas semanas cada verano con mi padre en Forks. Él era muy amigo de Billy Black el padre de Jacob. Cuando cumplí 16 años mi madre se volvió a casar con un jugador de baseball y me fui a vivir con mi padre para darles tiempo juntos ya que viajaban mucho. En mi nueva escuela conocí a los hermanos Cullen. Ellos eran los hijos adoptivos de uno de los doctores del hospital. Eran 5 jóvenes. Rosalie y Emet que eran pareja. Jasper y Alice también pareja. Y Edward.- Al mencionar su nombre sentí que perdí el aliento.

- Isa, amor si esto te hace daño yo no necesito saberlo, en verdad no me importa- John me miraba con gran cariño y supe que hablaba en serio.

- Debo continuar- dije. Ellos eran muy extraños y nunca se mezclaban con los demás estudiantes. Llevé un curso con Edward y compartimos carpeta, así fue como lo conocí. Al principio era muy esquivo conmigo como si quisiera alejarme siempre. Pero un día en el estacionamiento un auto se salio de control y él me salvó. Estuve a punto de morir. En otra ocasión cuando fui a la ciudad con unas amigas me perdí buscando una librería, fui acorralada por unos sujetos que querían lastimarme y entonces apareció él nuevamente y me salvó otra vez. Me confesó que me había seguido para protegerme y nos hicimos amigos.

Por esos días fui a La Push la reserva donde vivía Jacob, y él me contó que ellos eran enemigos de los Cullen por generaciones. Al parecer eran de bandos opuestos.

- ¿Qué eran exactamente los Cullen?- Preguntó Clara

- Pertenecían a un mafia, pero habían hecho un pacto de no agresión y respetaban su territorio.

- Los de esa reserva ¿también eran de la mafia?- Preguntó John, seguro preocupado por Jacob.

- No, sólo que ellos conocían su secreto y no lo divulgarían si los Cullen no le hacían daño a nadie.

- Dime Isa, que clase de negocios tenían los Cullen, ¿eran ricos?

- No lo sé realmente pero tenían mucho dinero, especulaban en la bolsa y cosas así- contesté. Bueno después de algún tiempo de frecuentarlos y cuando Edward se enteró que yo sabía su secreto empezamos a salir.

- ¿Pero no tenias miedo? Debiste contárselo a tu padre Isa- John se veía preocupado.

- Mi padre es jefe de policía en Forks y al principio temí que lo lastimaran. Pero después guardé el secreto porque me había enamorado de Edward- Hubo un profundo silencio ninguno se atrevió a decir nada así que continué.

- empecé a frecuentarlos y los conocí mas a fondo. Supe que no eran agresivos y no hacían daño a nadie solo que no les gustaba compartir con los demás. Pero un día otra banda llegó a Forks y hubo un altercado entre James su jefe y Edward. James me marcó y trató de matarme por todos los medios. Los Cullen me escondieron durante días y me sacaron de allí de regreso a Phoenix. Pero James era mas astuto y nos siguió se las ingenió para hacerme creer que tenía secuestrada a mi madre y yo caí en su trampa. Me torturó y estuve a punto de matarme pero Edward llegó antes y acabó con él.

- ¿Quieres decir que lo mató?- dijo John abriendo los ojos. Asentí mirándole a los ojos y otra vez se hizo un silencio.

- Ellos le hicieron creer a mis padres que sufrí un accidente en unas escaleras y todo volvió a ser como antes. Seguí viviendo en Forks aunque ya no frecuentaba la reserva porque al parecer no era bienvenida Billy Black me pidió en reiteradas ocasione que terminara mi romance con Edward y que ellos me protegerían pero yo no quería hacerlo.

- ¿Isa, eso del asesinato, dime nadie se enteró?- Clara se veía preocupada.

- No, nadie mas lo supo, ellos lo cubrieron bien.- Dije recordando el incendio que provocaron al estudio de Ballet.

- Pasé el verano con ellos, ya había presentado a Edward con mi padre así que éramos novios. Pero cuando llegó mi cumpleaños…- Recordé lo que pasó y a Jasper.

- Isa, hace mas de un año que estas aquí cariño no me he dado cuenta de lo torpe que he sido, nunca te lo he preguntado. ¿Cuándo es tu cumpleaños?

- En una semana, el día 13- contesté sin ánimo. – Cómo te decía, el día de mi cumpleaños, Alice me preparó una fiesta sorpresa en su casa, todo fue muy bonito hasta que Jasper… bueno él estaba en rehabilitación, y...-

- ¿Quieres decir que era una especie de adicto?- Clara estaba intrigada

- Digamos que si, era algo así. Bueno Jasper trató de matarme. Otra vez Edward me salvó, me alejó de de su ataque empujándome pero rompí una mesa de cristal y tuvieron que ponerme puntos- Dije mostrando mi brazo donde tenía aún la cicatriz.

John tomó mi brazo y lo besó. Pero cuando pasó su mano por la cicatriz que James me había hecho su cuerpo es tensó.

- Isa ¿y como te hiciste esto?- Me dijo mientras levantaba mi muñeca.

- Fue James, me quemó con una especie de ácido- Es todo lo que se me ocurrió para explicar el hecho de que esta parte de mi cuerpo siempre estaba fría y dura como una piedra.

- Isabella hija, has sufrido mas de lo que pensé. Estoy totalmente asombrada.

- Y aún no termino Clara.

- Continúa por favor- Concluyó recuperando su semblante.

-Después del último accidente que sufrí Edward se creyó que era bueno para mí y decidió abandonarme. Convenció a su familia y todos se marcharon Forks. No sé a donde se fueron.

- Jacob dijo algo sobre un bosque y que te él te abandonó allí, ¿es eso cierto?- Preguntó John.

- No es cierto. Edward me llevó al inicio del bosque detrás de mi casa y allí termino conmigo. Me dijo que no me amaba y que por eso se marchaba- dije agachando la cabeza.

- ¿Entonces pasaste todo eso por nada? ¿Nunca te quiso?- La mirada de John cambió del miedo, paso al enojo.

- John hijo, no saques conclusiones precipitadas aún-

- él tiene razón Clara. Todo fue para nada, yo no le convenía…

- Quizás tu no lo veas como yo porque eres aún muy joven, pero cuando vives un poco mas te das cuenta que para conocer a las personas y saber lo que sienten no siempre debes llevarte por lo que dicen sino por lo que hacen.- dijo muy lentamente

- No lo había visto así Clara, tu crees entonces que….

- Después de oír a Jacob pensé que Edward había jugado contigo y te había usado para después abandonarte, pero luego de saber las cosas por ti no lo creo. Estoy segura de que él te amaba, pero se dio cuenta de que al estar cerca de ti te ponía en peligro, quizás él no pueda ser una persona normal o no pueda dejar de ser lo que es y la vida que lleva pero no quería eso para ti, no quería verte morir.

- Madre, él la dejó, no luchó por ella…- John estaba ofuscado

- Se necesita amar mucho a alguien para dejarlo libre cuando sabes que tu no lo harás feliz- Dijo ella como si recordara algo doloroso en su pasado.

- También debo explicar lo de Jacob- Dije para cambiar el hilo de la conversación.

- Isa no creas que no me he dado cuenta de que Jacob está enamorado de ti- Dijo John algo molesto.

- No es eso. Yo no creo que me ame. Me está cuidando.-Respondí

- ¿Acaso piensa que ese tal Edward puede volver?- me dijo, y en sus ojos vi por primera vez un rastro de celos.

- Edward nunca volverá. Jacob me cuida de Victoria

- ¿Victoria?- dijo Clara.

- Era la mujer de James. Ella sabe que fue Edward el que lo eliminó y quiere vengarse conmigo. Me siguió hasta la nueva casa de mi madre en Jacksonville el año pasado, intentó matarme dos veces, una anterior en La Push, allí me defendieron los de la reserva pero la última vez Jacob la dejó mal herida y él teme que vuelva a buscarme.

- Nosotros te defenderemos si eso es por lo que él está aquí, esta demás- nunca había visto ese tipo de reacción en John, yo lo creía mas pasivo y con un carácter mas tranquilo.

- Jacob es mi mejor amigo John y tiene una beca. No le puedo pedir que se vaya- dije.

- Isabella, ¿Cómo puedes estar segura de que Edward no volverá? Algún día- La voz de Clara sonaba profética.

- No lo sé, él lo dijo, lo prometió. "Será como si nunca lo hubiera existido"- Dije susurrando

- ¿Y si regresa?- Dijo ella forzando una respuesta mía. Pero no le pude contestar.

- Te agradezco que hayas sido sincera Isabella y que nos hayas abierto tu corazón. Hasta aquí puedo participar, las decisiones que tomen ustedes son solo suyas. Yo respetaré y aceptaré lo que decidan y si quieres algún consejo o mi opinión te la daré. Ahora debes conversar con mi hijo. Los dejo solos- Y diciendo esto salió.

Ahora decidiría si realmente valía la pena continuar mi tibia relación con John. Sentía que de cierta forma lo estaba usando para no sentirme tan sola. Y también estaba Jacob. Qué podía hacer. ¿Y si Victoria volvía? Acaso no pondría en peligro a John también. Esto no me dejaba en paz. Pero tendría que definirlo de una buena vez.

capitulo 14

CAPITULO 14
EDWARD POV
Mis pensamientos volaron tratando de asimilar todo. Cuando fije la vista en mis manos vi el papel estrujado. Tuve que sentarme y cerré los ojos. Estaba convencido que esto dolería, pero no había imaginado que estas punzadas fueran tan agudas.
Celos. Si, mis manos estaban tensas, me estaba conteniendo.
Lo sabía, con el tiempo me olvidaría, cada vez sería más lejano el recuerdo y un día solo sería en su mente como un sueño que se desvanece. Si pudiera llorar, sería ahora. Como imaginarla caminando por aquel lago donde crecí, de la mano de alguien mas. Fue muy poco el tiempo que pasamos juntos, por eso ella olvidaría pronto. Y ¿yo? Tendría que seguir por siempre con este dolor. No podía culparla, yo la llevé a esto, yo le pedí que continuara con su vida.
Jacob también la quería, su amor jamás sería tan intenso como el que yo sentía, pero estaría cerca, tal vez también haya tenido su oportunidad.
Dejé que un buen tiempo pasara, ya era de noche. Tendría que terminar con todo esto aunque salga herido.
COMPLICACIONES

Me levante gritando. Había soñado con Victoria, sus ojos y su cabello rojo. Eso no traería nada bueno. No le había dejado a Jacob el día anterior contarme nada de ella. Me levanté y me cambié rápido, tenía muchas cosas en mente. Ver los nuevos horarios, las nuevas materias, consultar bibliografías y textos recomendados. Cuando salí de mi habitación, en la pequeña salita me estaba esperando Annie y María, las dos tenían caras muy serias.

- Buenos días- Dije muy despacio

- Necesitamos respuestas- Dijo María

- Canta Isabella- agregó Annie

- Que quieren saber, si es por Jacke…- Dije apesadumbrada. No tenía ni 24 horas aquí y ya me estaba metiendo en líos.
- Ah, Jacke, ¿bueno qué es él en tu vida? Y no nos mientas, ayer John se fue muy triste de aquí- María estaba furiosa


- Él es mi mejor amigo, me ayudó mucho, ha salvado mi vida en dos ocasiones, nos conocemos desde niños…

- ¿Salvado tu vida? Si vivías en un pueblo pequeño, que podía haberte pasado- Annie parecía no poder creer

- Además, no tiene modales, es un confianzudo y maleducado y habla como si le pertenecieras.- María si que estaba furiosa.

- Además te llama Bella ¿así te decían antes?- Dijo Annie pensativa.

- No quiero hablar de eso. Jacob va a estudiar aquí, es mi mejor amigo y me gustaría que lo aceptaran también. Sé que es un poco torpe en su trato y que sus modales no son finos, pero es la persona mas divertida y sincera que conozco…

- ¿Solo dime que no es él por quien sufres tanto?- Dijo María

- Yo no sufro!- Grité

- Isa, te hemos oído llorar todas las noches los primeros meses cuando llegaste, gritar por tus constantes pesadillas, tu rostro siempre estaba triste y te refugiarte en los trabajos y en los libros. Solo hace unos meses desde que sales con John que te hemos visto sonreír aunque no completamente, pero pensamos que te estabas recuperando. Solo tememos por ti.- Annie podía ser tan cariñosa para hablar.

- Y claro también esta John, no creo que sea buena idea que Jacob se integre a nosotros, al menos no de golpe, quizá poco a poco para irlo conociendo.- Dijo María más calmada.

- Veré que puedo hacer- Dije y salí rápidamente, no tenía ganas de seguir hablando con ellas.

Abrí la puerta y me encontré cara a cara con Jacob.

- Bella que bueno que ya estas levantada, no sabes el hambre que traigo, donde se puede comer aquí.

- Hola Jacke, ven conmigo te mostraré el comedor. Hay horarios para las comidas espero que no llegues tarde o encontraras poco. También esta la cafetería pero si no te disciplinas con los horarios terminarás gastando mucho en comida.

- Claro y después no tendré dinero para invitarte a salir.

- Con calma Jacke, estamos aquí para estudiar.

Nos sentamos y me contó como estaban a La Push y el Forks, quienes habían ido a que universidades y sobretodo como estaba Charlie.

- Dime Jacke, ¿Victoria ha vuelto a aparecer?- Pregunté.

- Ni sus luces, si es que todavía anda por allí.

- Bien. Eso me deja mas tranquila

- Bella estoy aquí, nada te pasará.

Le mostré la biblioteca, las salas de Internet, los pabellones de clases, se quedó impresionado con el estadio que pertenecía a la universidad.

Consultamos horarios de clases, actividades extras y algunos talleres y sin darnos cuenta ya estábamos otra vez en el comedor almorzando.

Por la tarde fuimos conocer el lago, corría de allá para acá como un niño.

- Bella me va a gustar este lugar- Dijo al fin

- Creí que los considerabas gris.

- No. Es fantástico, es la primera vez que vivo fuera de la reserva, esto es alucinante, como otro planeta, y para hacerlo aún mas emocionante estas aquí. Esto es lo máximo. Y tengo auto. Vamos a cenas otra vez fuera a la ciudad. Quiero comer Pizza, con mucho queso y tomate. ¿Qué dices?- Preguntó con una amplia sonrisa.

- Bueno pero si me prometes que a partir de mañana serás un modelo de estudiante.

- Claro, sin problemas, siempre se me ha dado bien los estudios, no es tan difícil, aunque me gustaría entrar a algún equipo, practicar algún deporte, tu sabes Asun estoy creciendo y necesito estirar los músculos- Dijo mostrándome sus bíceps, que de por si se veían trabajados. No me había dado cuenta de lo fuerte que se veía, era muy alto.

- Excelente buena forma de canalizar energía- contesté aliviada, los deportes le quitarían mas tiempo.

- Ahora me voy a cambiar- le dije

- Ok, te espero en dos horas y no me hagas entrar en tu habitación por ti- Y salio disparado rumbo a su pabellón

Caminé rumbo a mi habitación y John me esperaba en la puerta. Sus ojos eran recelosos, sabía que quería preguntarme algo.

- Hola Isa, no te he visto en todo el día- Dijo con tristeza

- Hola. He pasado el día con mi amigo Jacob mostrándole el campus tu sabes es nuevo y necesita adaptarse. Quedamos en ir a comer pizza en un rato, quizás podamos ir con los demás y…

- No creo, tengo que ir a ver a mi madre. Hoy es su cumpleaños.- Dijo

- No lo sabía- Dije sorprendida

- Vine ayer para invitarte, hoy hay una pequeña reunión para celebrar, pero estabas muy ocupada. Tal vez puedas ir después. Solo me avisas. Llámame y yo pasaré por ti- El remordimiento me estaba matando.

- Bueno si, no se a que hora exactamente pero pasaré por allí- Dije pensando que sería bueno llevarle como obsequio.

- Bien te veo luego- Me dijo y se marchó

Cuando íbamos por la tercera Pizza le hable a Jacob de reunión en casa de John por el cumpleaños de su madre.

- Bueno entonces paso a dejarte allí ¿estarás bien no? Necesitas que te lleve de vuelta a la universidad- Pregunto

- No. John lo hará- Esperaba que lo entendiera

- Claro. Ojitos verdes, lo había olvidado.

Me llevó hasta del gran portón de la casa de los Massen.

- Vaya- silbó- Pero que caserón- Se ve que al hijito de mamá nunca le falto nada.

- Jacke no hables así, tu no lo conoces.

- ¿Isabella?- La voz de una mujer me sobresaltó.

De un auto muy elegante bajó Clara con un hermoso vestido negro de encaje.

- Hola Clara. Feliz cumpleaños- Dije y la abracé

- Que gusto de verte aquí. Pasa hija creo que hay una reunión allá dentro, siempre me quieren dar la sorpresa como si no lo supiera.

Rápidamente presenté a Jacob con Clara.

- Clara, te quiero presentar a mi mejor amigo Jacob Black que acaba de mudarse a la universidad. Jacob, ella es Clara la madre de John.- Dije tratando de parecer casual.

- Encantado de conocerla- Me quedé petrificada, Jacob con unos modales totalmente desconocidos hasta ese momento se inclinó y besó la mano de Clara.

- Vaya que simpático amigo tienes Isabella, porque no pasan, así podré conocerlo un poco mejor- Ay no, esto se estaba complicando. Que iba a hacer Jacob aquí. Quería gritarle, había hecho eso a propósito para colarse a un lugar donde no había sido invitado.

Le obedecimos y fuimos detrás de ella. Jacob no dijo palabra en el trayecto y se comportó como si no fuera él. La cena transcurrió sin contratiempos. Jacke estaba sentado a mi lado y frente a John que no le quitaba la vista de encima sobretodo cuando Jacke acaparaba mi atención o me contaba alguna anécdota de La Push.

Después de partir el pastel de cumpleaños y las palabras de rigor Jacob se mezcló con los demás para observar la mansión.

- Extraño tu amigo- Era la voz de John

- ¿A que te refieres?- Pregunté intrigada

- Ayer parecía un patán y ahora se comporta diferente, eso me parece extraño.- Y no se equivocaba pero como podía yo decirla la verdad.

Pasamos casi una hora conversando amenamente sobre nuestros amigos. John me contó que Annie estaba saliendo con un compañero de su facultad. Me sentí culpable, yo pasaba más tiempo con ella, aunque no en las últimas vacaciones, y él parecía más enterado que yo.

De pronto sentí la figura de alguien delante de mí.

- Bella ven conmigo- Era la voz a Jacob

- ¿Jacke que te pasa?- Le dije molesta

- Estaba buscando un baño en el segundo piso-

- Si no lo encuentras te lo puedo mostrar- John se levantaba para acompañarlo.

- A diferencia tuya yo no necesito ni jamás necesité niñera ojitos verdes- dijo en tono despectivo

- Jacke que te sucede- dije sorprendida

- Si no vienes te llevo a la fuerza, decide- Dijo amenazante.

- Vuelve a repetir eso y te arrepentirás- Se tensó John y me di cuenta a que se refería a Jacob. El segundo piso. Había encontrado el cuadro.

- No hay problema John quédate aquí.- Dije asustada

- Pero Isa- Replicó

- Por favor- alcancé a decir.

Jacob me tomo del brazo y me llevo allí.

- Explícame- Me dijo. Frente al cuadro.

- Sencillo. Es Edward. Humano- Fue lo único que se me ocurrió decir

- ¿Sencillo? ¿Que clase de masoquista eres? ¿Te estas relacionando con la familia de la sanguijuela esa? ¿Por Dios Bella estas saliendo con su tátara sobrino o algo parecido?

- No soy masoquista. Estas personas han sido muy buenas conmigo y me quieren- Repliqué

- Bella esto es anormal tu no puedes estar con ellos, ¿no vez que sólo lo haces porque te lo recuerdan?

- Jacob basta!- Grité

- Acéptalo Bella se fue, te dejó y no va a volver.

- Cállate! No necesitas recordármelo, cada día lo tengo presente- Y no pude evitar reprimir mis lágrimas

- Creí que esa chupa…ese fenómeno no volvería a molestarte- dijo furioso

- ¿Isa? ¿Que te sucede?- Era John para terminar de complicar todo.

- No te metas que esto no es contigo niño rico- Gritó enfurecido Jacob

- No le vas a gritar a mi novia, en mi casa- Y John me tomó de los hombros y me atrajo hacia sí. – Vamos Isa querida, tu amigo es un demente- Yo no podía parar de llorar.

- Deja de llamara Isa papanatas, ella siempre ha sido Bella, desde que nació. Y es la mujer mas fuerte que conozco no necesita que la proteja alguien tan débil como tu- Jacob se estaba pasando de la raya.

- Como puedes llamarte su amigo y ser tan grosero. Eres un vulgar perro.- John estaba furioso.

Jacob soltó una risotada.

- Vaya veo que ese afán protector viene de familia. Pero espero que reconsideres esto. Bella entiéndelo bien. Él no va a volver jamás. Esa sanguijuela inmunda se marchó para siempre. Déjalo ir. Y tu niño rico, quema este cuadro- Y salió de la casa.

- ¿Jacob porque hablas así? Era la voz ce Clara. – ¿Tu también conociste a Edward?

Eso era más de lo que podía soportar.

- Claro que lo conocí. Era un estúpido y pedante niño rico que miraba a todo el mundo como si apestaran. Era un egoísta que solo ponía a Bella en peligro y casi hace que la mataran más de una vez. Y luego se marchó y la dejó abandonada en un bosque donde casi muere de inanición. Ese era el gran Edward Cullen y su retorcida e incestuosa familia. Algún día lo voy a encontrar y ajustaremos cuentas, no es mas que un cobarde.- Jacob casi gritó las ultimas palabras y salio de allí dando grandes zancadas.

Clara me abrazó, me solté de los brazos de John y me aferré a ella. Sabía que le dolía tanto como a mí oír aquellas palabras.

Sin decir nada me llevó a una de las habitaciones y me acostó en una hermosa cama. No me preguntó nada, solo acarició mis cabellos hasta que me dormí cansada de tanto llorar.

Premio ^^



Reglas:


1-Agradecer a quien os lo entregó.
- muchisimas gracias Kassi

2-Entregárselo a 5 blogs.
El premio es para.



Capitulo 13

Hola chicas perdon por publicar apenas jeje xD pero esque la escuela me consume ^^ les recuerdo que publico los lunes y los jueves bueno pues cuidense muchonos vemos!


CAPITULO 13

El invierno había terminado y todo comenzaba a cobrar vida. Pronto tendríamos un par de semanas de descanso, que en verdad necesitaba. No debería adelantar cursos el siguiente año si quería tener tiempo para mis amigos y mi novio. John era simplemente encantador. No nos veíamos a diario porque yo siempre estaba ocupada, pero venía por mi cada dos o tres días. Íbamos al cine o a cenar. Todos parecían alegrarse con nuestra relación. Incluso Clara se me alegraba de verme del brazo de John. Iba a cenar con ella todos los viernes.

No había tenido tiempo para planear a donde ir en los días libres, pero definitivamente visitar a mis padres estaba descartado. Rachel se estaba encargando de hacer un city Tour como es debido, ya que yo no había tenido la oportunidad de recorrer la ciudad en plan turístico. Todos se habían apuntado a ello. El último día de clases vinieron a nuestra habitación, estábamos todos apretados por lo que decidimos salir al aire libre y planear las vacaciones en el césped.

- Aquí traigo los folletos, van a ser varios días, empezaremos por los lugares cercanos como el planetario Adler, el zoológico, la fuente
Buckingham, el acuario. Es decir lugares a los que aun no ha ido Bella- Decía Rachel emocionada, su hermana trabajaba en una agencia de viajes y tendríamos un buen descuento extra.

- ¿Entonces dormiremos aquí todas las noches?- Preguntó Karin con tristeza

- No las últimas 3 noches, iremos más al sur, tal vez Springfield

- ¿Que?- dijeron todos.

Yo no entendía, pasar 3 días fuera sonaba bien, para mis limitados fondo.

- Yo estoy de acuerdo- dije sin mucha convicción

- Si tu quieres ir yo también estoy en esto- Dijo John sin dudar.

- Me encargaré de todo- Dijo Rachel y salió corriendo, seguida de Juliet y Karin que iba vociferando por detrás.

Visitamos varios lugares céntricos, la torre Sears me impresionó, desde allí vi un atardecer precioso.

Los días se iban volando. Conocí tantos lugares que ni siquiera sabia que existían, y en las noches me acostaba cansada porque quería recuperar horas de sueño.

John era muy comprensivo, siempre respetaba mis decisiones y me complacía. Aunque solo habíamos tenido un par de tardes juntos ya que el resto del tiempo estábamos en grupo, siempre se mostró atento. Era como si quisiera ir muy lento hasta estar seguro de que sintiera de verdad algo especial por él. No quería pensar si era afecto o amor, mi corazón estaba cerrado y silencioso y así sería por ahora. Si él no me presionaba tal vez esto podría funcionar.

Cuando regresamos de aquel fugaz viaje, que tan solo duró dos días me dedique mas a mis clases, pronto terminaría el año y tendría los exámenes finales. Mis amigos también estaban concentrado en lo suyo con lo cual podía estudiar todo el tiempo sin sentirme culpable por no salir.

Obtuve muy buenas calificaciones y alguna que otra felicitación de mis tutores y profesores.

El año académico termino muy rápido y conseguí un empleo para poder quedarme en vacaciones. Visité a Renée unos días pero fui sola. Me parecía de muy mal gusto que en menos de tenga noticias de otro novio más, sin contar con Jacke.

Encontré trabajo en una librería donde me cedieron una pequeña habitación como parte de pago, aunque Clara me había ofrecido a quedarme con ella en su casa yo no había aceptado. Pude leer muchas obras en ese verano.

El lago era precioso, solo nos habíamos quedado en la ciudad Annie, John y yo, solíamos ir todas las noches allí. A la luz de la luna era mágico. No quería recordar nada de mi pasado, me negaba a todos los pensamientos que me trajeran tu recuerdo.

El verano pasó, conversaba con mi madre todos los domingos, Charlie también llamaba seguido aunque la conversación se agotaba en 5 minutos.

Al iniciar el nuevo año académico, traje de vuelta mis cosas. Annie ya se había adelantado y me había dado una llave. Venia arrastrando mí pesada maleta cuando vi quien estaba en mi puerta.

- Bella! Te he buscado por todos lados, rayos que te has hecho en el cabello, pareces un pájaro- Allí estaba él, con la sonrisa mas despreocupada del mundo

- ¿Jacob? ¿Qué haces aquí?- Pregunté totalmente en shock

- A que no me esperabas tan pronto- sonrió- claro como no me has llamado en casi 6 meses.- Me reclamo con una sonrisa

- Te llame una vez pero no estabas.

- Por cierto la chupasan…

- Aquí no!- Grité – No vuelvas a mencionar nada que me recuerde el tiempo que pasé en Forks

- Vaya, entonces yo no existo… ¿soy un mal recuerdo también?- Preguntó serio

- Jacke he iniciado una nueva vida, tengo nuevos amigos, novio, todos aquí me llaman Isabella…

- Para para… ¿novio?- Dijo intrigado

- No me estas escuchando Jacke!

- Claro que si, dijiste novio, he parado bien las orejas.

- Bueno si, que hay con eso.

- No Bella, te dije que me esperaras, es tu problema como te deshaces de él- y sonrió

- Eres imposible

- bueno eso me recuerda…- Y me abrazó con fuerza

- ¿Qué haces?- Pregunté sofocada

- Este es de Bill, este de Charlie, este de Ángela, de Ben..

Me soltaba y volvía a estrecharme con fuerza, casi tenia las costillas rotas.

- Y el del imbécil de Newton no te lo voy a dar.

- Para Jacke me vas a matar

- Pero falta el Mio- dijo y antes de que pudiera recuperarme mis pies dejaron de tocar el suelo y di dos vueltas en el aire. Terminó estampándome un beso muy sonoro en la frente.

- Creo que con eso concluyen los saludos. ¿Ya podemos entrar?- Pregunto divertido.

- Si claro pasa.

- Uy Bella tienes una habitación muy pequeña.

- ¿Dime, de verdad vas a estudiar aquí?- Pregunté

- Claro aunque no se si pueda acostumbrarme, es muy gris, no se, todo es reducido

- Claro no es tan amplio como Forks.

La puerta se abrió y pude ver las sonrisas congeladas de Annie, María y John.

- Hola, que hay- dijo Jacob sonriéndoles

- Jacke ven te presentaré a mis amigos

- Él es mi amigo Jacob Black de Forks.- Dije con formalidad. – Ellos son María, Annie y John, mis amigos de Chicago

- Vaya, chicos citadinos- Dijo Jacke soltando una carcajada.- Un gusto conocerlos, aunque Bella no me había hablado nada acerca de ustedes- Les dio un beso a las chicas y estrechó la mano de John.

El silencio se hizo tenso, todos lo miraban entre ofendidos y sorprendidos.

- Bueno Bells, tengo hambre, llévame a comer una de esas grasosas hamburguesas con carne que hay por aquí.

Y diciendo esto y antes de que pueda responder, tomó mi mano y me sacó rápidamente de la habitación. Cuando pude recuperar el habla ya estábamos fuera de la habitación y cerca de un auto.

- Jacke, no me puedo ir así, ellos…

Me abrió la puerta del copiloto y me sentó en el asiento.

- No me puedes llevar así. Oye ¿este es tu auto?- Pregunté

- ¿Si, te gusta? Un regalo de Billy ya que obtuve una beca completó lo que me faltaba para comprarlo.

- Guau es muy lindo…ay… mas despacio- Había pisado a fondo el acelerador, tanto que quedé un poco mareada.

- No seas aguafiestas Bella, como si no hubieras visto conducir mas rápido, además me gusta la velocidad. Te llevaría cargada para llegar más pronto pero hay mucho público, además no conozco esta ciudad.

Llegamos a un restaurante de comida rápida, pedimos hamburguesas, Jacke engulló tres el solo.

- Desde cuando no te alimentas, al menos respira- Dije preocupada

- Desde la mañana, estaba ansioso por verte, estas muy bien, aunque esos ojos y ese pelo no te caen, se te ve fingida.-

- ami me gusta y eso es lo que importa.

- Ahora que ya no tengo apuro, aclárame algo, como es eso de tu novio, no me vas a decir que era ese niño consentido que llegó con tus amigas-

- ¿Como puedes hablar así? ¿Por qué lo llamas consentido?

- Ah, era él. Bella se ve a kilómetros. Ropa fina, manos suaves, modales de niña...- Dijo

- Es un buen estudiante…

- Claro con el dinero de sus papitos. Tus gustos no cambian ¿verdad?

- ¿Qué quieres decir?

- Niño fino, rico, guapo.

- Cállate Jacob- Me levante de un salto.

- Está bien, lo siento. Pero te comunico que su romance, si es que hubo, acaba de terminar-

- Eres imposible, si vas a portarte así…

- Esta bien, no hay problemas, tu sigue con tu vida, yo me encargo-

- Jacke por favor no me compliques la vida. Si viniste hache y con una beca, será mejor que estudies mucho y te esfuerces por conservarla-

- Si problemas Bella, estudiaré mucho. Te prometo que solo te molestaré en mis ratos libres.

- con tal de que no coincidan con mis clases.

- Solo dime una cosa, es solo una respuesta simple y directa… ¿Lo amas?-

- Yo, pues, creo, no estoy… ¿porque me preguntas eso?

- Eso era todo lo que necesitaba saber- Dijo con una gran sonrisa y se levantó

Fuimos a ver una película y regresamos tarde. Me llevó a conocer su habitación que afortunadamente quedaba muy lejos de la mía y luego me acompaño hasta mi puerta.

- Que duermas bien Bella, mañana será un largo día.- Dijo y se marchó.

Afortunadamente María y Annie estaban dormidas y no hicieron preguntas, pero sabía que pronto tendría más de un dolor de cabeza.

Capitulo 12

Edward POV
Estaba sorprendido. No sabía que aún tenía familia. Mis recuerdos pasados eras muy borrosos. Recordaba vagamente todo, como un sueño que se desvanecía. Sé que había un niño, apenas mayor que yo, era mi mejor amigo y jugábamos. Él me defendió una vez, yo estaba asustado aunque no recuerdo porque. Ahora lo recordaba. Ojos verdes, cabellos rubios, hoyuelos y una gran sonrisa. William. Los abuelos se lo llevaron a Londres y yo quedé muy triste. Cuando estalló la guerra mi padre escribió mucho para traerlo de vuelta. Mis abuelo, habían muerto en la guerra. Por creí que no tenía mas familia. Siempre pensé que estaba solo. Mi nueva familia inmortal era sin dudar lo mejor para mi. Pero antes de conocer a Bella siempre me había creído que no tenía a nadie más.

Tenía familia y mi Bella la había encontrado. ¿Qué podía tener ella para ser así? Tan cercana a mí, nuestras historias se entrelazaban siempre. Soñé con que nuestros caminos corrieran juntos, que se convirtieran en uno solo. Eso no pasaría jamás.

Tomé la siguiente carta siempre con el temor del contenido. En alguna de ellas tal vez me diría que conoció a alguien especial. Podría soportarlo. Si sabía que ella era feliz.

CUARTA CARTA
Nuevas oportunidades

Clara y yo nos hicimos amigas, aunque ella respetaba mi silencio y no me hacía preguntas al respecto pero me facilitó los diarios y todos los documentos de su familia. John siempre estaba de buen humor y pasaba por mí cada vez que visitaba a Clara, aunque no era partícipe de nuestro secreto. Me preguntaba dónde te encontrabas ahora y si tus distracciones te hacían feliz.

Caminaba un día de la biblioteca a mi habitación cuando oí una voz llamarme.
- Isa ¿Qué planes para hoy?- Era John. Karin iba con él.

- ¿Hoy?- contesté intrigada. – Déjame ver, presentar dos trabajo, uno de literatura inglesa y otro de Historia del Renacimiento. Trabajo en un ensayo.
Ellos dos sonrieron, no sabía que les parecía tan gracioso.

- ¿Me estoy perdiendo de algo?- Les dije algo molesta.

- Uy parece que Isabella no tiene un ápice de romanticismo ni es muy amistosa – Dijo Karin muy divertida.

- Isa, ¿has visto que fecha es hoy?- Dijo John con mucho entusiasmo.

- La fecha- pregunté. Sin pensar saque mi agenda, hace dos días que no escribía nada ya que todos los deberes los tenía memorizados. Cuando pasé mi dedo por las hojas me fijé mejor.

- Bueno es viernes 14 de febrero, ¿que hay con eso?- Uy caí en la cuenta. Chocolates, flores, confetis, parejitas por todos lados.

- También es el día de la amistad.- Dijo John un tanto apenado.

- ¿Vamos a salir hoy?- Pregunté, no me hacía gracia ir a cenar a algún lugar donde todo este puesto para dos personas.

- Podemos caminar por el lago, aunque eso estará un tanto concurrido- Sonrió Karin.

- Bueno iba a proponerles cenar en casa de mi madre, ella me pidió que los llevara, pasa estos días algo sola- Dijo John un poco avergonzado

- En tu casa. Genial!- Gritó Karin –Les diré a los demás- Y salió corriendo.
- Isa que dices, ¿vendrás?- Me preguntó

- Si claro, me encantará volver a ver a Clara- Y el aquel retrato, pensé
A las 7 de la noche ya estábamos todos allí. La cena estuvo espléndida, digna de aquella casa. Pasamos a uno de los salones para conversar y jugar un poco ya que habían instalado varios juegos de mesa. Me excusé y salí de allí.

Subí las escaleras y de inmediato ya me encontraba en aquel corredor blanco. Sentía una opresión en el pecho. Aquel cuadro me llamaba, sólo a mi. No se cuanto tiempo pasó. Mis ojos estaban llenos de lágrimas y sentí una mano sobre mi hombro.

- Isa, ¿estas bien?, ¿Qué te sucede?- preguntó. Su voz era suave y cálida. John era muy atento conmigo siempre.

- No me pasa nada, solo pensaba- contesté

- Es la segunda vez que te veo aquí. ¿Te gusta esta pintura?- Yo solo asentí.

- Sé que es un pariente, debió haber vivido hace mucho.- Dijo sin interés
Yo no quería hablar, solo seguía con la mirada perdida en el rostro que tenía delante. Era una buena pintura, aunque el modelo real era infinitamente mejor.
- Isa… - Y me volteó para mirarle. – Yo sé que sufres por algo pero me gustaría que compartieras tus penas conmigo. Realmente me gustaría compartir mas contigo- Dijo y su voz temblaba

- John estoy bien. No necesito…
- Pero yo si te necesito.

- No por favor. Aquí no- dije temblando. El lo notó y me abrazó. Me estrechó contra su pecho y tuve ganas de llorar.

- Isa- Dijo acariciando mi rostro. – Isabella… Bella….
Me solté inmediatamente

- No me llames así- grité

- Pero suena mejor, es mas hermoso, es como tu…

- Jamás me vuelvas a llamar así John.

- Está bien, lo que tú digas. Te llamaré como tú quieras y estaré contigo todo el tiempo que quieras…

- ¿Qué?

- Isa… yo… yo te quiero…

- No me digas eso… no aquí, no frente a….

- Isa solo son retratos viejos de una familia que no conocí. Apenas pueda venderé esta casa y botaré todos esos cuadros tan tristes….

- ¿Qué? Nunca me oyes, nunca te dejaré tirar este cuadro.

- A qué viene eso Isa. Los cuadros no importan. Te estoy diciendo lo que siento, se que no me correspondes, aún. Que guardas algo y espero que con el tiempo…

- ¿Con el tiempo? ¿Qué esperas John Massen?

- Soy Tucker, no Massen. Jamás me he sentido un Massen, ni siento que esta sea mi casa.

- Lo siento, no pensé ofenderte.

- Tú no me ofendes Isa. Tu solo me haces feliz.

- No sigas con eso, no hay futuro- dije para mí.

- Siempre hay futuro Isa, tu solo déjame entrar en tu corazón.

- No John. Yo ya no tengo corazón.

- Sé que te han hecho daño, puedo verlo entes ojos. Dame una oportunidad, solo déjame estar cerca de ti.

- Lo siento… - Dije y ya no pude contener mis lágrimas. Salí de aquella casa corriendo. No quería volver más. El pasado me dolía y el futuro me llamaba.

Debía hacer algo urgente, algo que cambiara todo. Algo drástico. Me frené en seco mientras corría. Sin pensarlo dos veces volví sobre mis pasos, seque mis lágrimas. No tuve que andar mucho, lo encontré en el camino de vuelta, John corría hacia mí con un abrigo grueso en las manos. Me plante frente a él.

- Yo también quiero una oportunidad- Le dije

Él comprendió. Solo me abrazó y caminamos sin rumbo o tal vez si había un rumbo… tal vez lo habría.